Argentina amaneció paralizada en rechazo de la política económica de Macri

Las principales ciudades argentinas amanecieron este miércoles sin transporte público, ni clases, ni recogida de basuras y con los bancos cerrados y los servicios de salud limitados por la quinta huelga general que la principal central sindical convoca contra el Gobierno de Mauricio Macri.

Paro en Argentina por huelga contra Macri
Las principales ciudades del país amanecieron desoladas

En Buenos Aires, Córdoba y Rosario llama la atención la imagen de calles y estaciones vacías, y tampoco hay vuelos nacionales ni internacionales desde o hacia los más importantes aeropuertos del país, con excepción de la aerolínea de bajo coste Flybondi, que opera en el aeródromo de El Palomar de la capital.

Además, se registran cortes en los principales accesos a Buenos Aires como el puente Pueyrredón y el puente La Noria, con movilizaciones sindicales y despliegue de policía.

No obstante, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, aseguró en declaraciones a radios locales que el Gobierno no permitiría el corte de puentes y que por tanto intervendrían las fuerzas de seguridad para evitarlo.

“Estamos hartos de los paros, de que cada dos por tres hagan un paro. Es el quinto paro. Cuando hay un gobierno que no es del partido de los sindicalistas, pasa esto”, añadió Bullrich.

La Confederación General del Trabajo (CGT) comenzó la pasada medianoche su quinta huelga general contra la política económica del Gobierno de Mauricio Macri desde que asumió el poder en diciembre de 2015, en un momento de crisis económica marcada por la alta inflación, la caída del empleo y la subida de la pobreza.

Además, la medida se lleva adelante en un creciente clima electoral, por la proximidad de las elecciones presidenciales y legislativas del 27 de octubre próximo, que tendrán unas primarias de voto obligatorio el 11 de agosto para elegir a los candidatos definitivos.

Si bien este paro, al que se adhieren sindicatos clave como los del transporte – con trenes, metro y autobuses sin servicio principalmente en Buenos Aires -, no incluye una movilización central, sindicatos y organizaciones de izquierda han llamado a manifestarse y se celebrarán, a lo largo del día, marchas y ollas populares con las que se dará de comer a la gente en la vía pública.

“Porque el deterioro de la situación económica y social se agrava día a día. Porque la inflación destruye el poder adquisitivo de los salarios, las jubilaciones y las asignaciones sociales. Por un aumento del salario mínimo vital y móvil”, expresó la CGT en la convocatoria del paro.

En 2018, la economía cayó un 2,5 % afectada por la recesión y el desempleo trepó al 9,1 %.

 

EFE