“Chococrispies” caseros

    Hoy vamos a hacer una receta que te gustará mucho, ya que más que una receta es un truco o “tip” para comer de forma original. En esta ocasión vamos a hacer un arroz inflado con cacao, muy rico, sano y con extra de crujiente.

 

INGREDIENTES:

– Arroz de grano corto y redondo
– Esencia de vainilla
– Cacao en polvo
– Aceite de girasol

PREPARACIÓN:

En primer lugar, vamos a coger un cazo y lo vamos a poner con agua en la vitrocerámica a fuego fuerte. Le vamos a añadir un chorrito de esencia de vainilla. Hemos usado esencia de vainilla para darle un toque dulce, si quieres puedes hacer este arroz con sabor más salado añadiendo caldo de pollo. El resultado también está bastante bien pero tal y como he dicho, el sabor sería salado.

Una vez hemos añadido la esencia de vainilla, añadimos también el arroz y lo dejamos a fuego fuerte una vez que ha empezado a hervir durante unos 15-18 minutos. Cuando ha pasado ese tiempo, vemos que el arroz se ha hinchado, apartamos el cazo y escurrimos bien para que no quede agua en el arroz.

Por otro lado, vamos a usar ahora una bandeja de horno con papel vegetal y vamos a esparcir bien el arroz sobre la bandeja y vamos a ponerlo en el horno a 100º durante unos 40 minutos ¿para qué queremos eso? La idea es que al meterlo en el horno el arroz se seque de forma que sufle o se hinche mucho mejor y sin resto de agua.

Cuando ha pasado esos 40 minutos vemos que el arroz ya está seco, ahora pasaremos al siguiente paso.

En un cazo con aceite de girasol (mejor el de girasol porque de oliva daría un sabor más fuerte y no es lo que buscamos en esta receta) a temperatura fuerte vamos añadiendo el arroz poco a poco. Verás que el arroz se hincha casi al momento en el que toca el aceite por lo que el arroz se mantendrá en el aceite unos 5-6 segundos y nos ayudaremos de un escurridor para sacarlo.

Pondremos una servilleta para que el aceite sobrante se deposite ahí y así nuestro arroz tendrá menos grasa.

Cuando hayamos frito todo, iremos añadiendo cacao en polvo y lo moveremos con una cucharita para que se integre todo bien. El cacao será el que le dé el sabor que tanto buscamos, el sabor a chocolate. Si te lo metes en la boca podrás ver lo rico y sobretodo lo crujiente que ha quedado.