Un empresario vinculado a la industria farmacéutica y además dueño de una flota de camiones en la ciudad de La Victoria del municipio José Félix Ribas, fue asesinado en horas de la madrugada de ayer en la Autopista Regional del Centro, a la altura del kilómetro 68 en sentido a la ciudad de Maracay.
La víctima se trataba de Elbert Antonio Pacheco Rivas, de 45 años de edad, padre de cuatro hijos y domiciliado en la Ciudad de la Juventud. Era muy conocido con el nombre artístico del “Catire“.
Su muerte ocurrió a la 1:45 minutos de la madrugada en el momento cuando estaba siendo atendido por los facultativos de guardia del Hospital José María Benítez.
La trayectoria balística le ocasionó exposición de la masa encefálica, y horas después su cadáver fue trasladado al Servicio de Medicina y Ciencias Forenses, con sede en Caña de Azúcar, sector 9 del municipio Mario Briceño Iragorry para la autopsia de ley.
En las afueras de la Base de Homicidios de Maracay, Ambar Pacheco, hermana de Elbert Antonio, ofreció declaraciones a los medios, señalando que el suceso ocurrió pasadas las 12:00 de la madrugada de ayer.
“Mi hermano regresaba de la ciudad de Caracas, manejando un camión y al ingresar a territorio aragüeño, adelantó otras unidades de carga pesada de su propiedad“, dijo.
De la Autopista Regional se dirigió a su residencia, pero en el trayecto le avisaron por teléfono que uno de los vehículos se había accidentado, respondiendo después al interlocutor lo siguiente: “Tranquilo, ya te envío una grúa“.
Solicitó la ayuda cuando iba pasando por el peaje de La Victoria, continuando con su viaje a su residencia. Luego de bañarse, comer e intercambiar algunas palabras con su familia, se acostó a dormir al lado de su esposa.
Transcurrido unos minutos, Elbert Antonio recibió una segunda llamada, donde le notificaban que unos delincuentes le estaban desvalijando el camión que venía de regreso sin mercancía.
Sin perder tiempo, el empresario solicitó el apoyo de unas personas, y se trasladó de nuevo a la Autopista Regional, encontrándose con un grupo de sujetos incurriendo en sus fechorías.
Seguidamente el hombre y sus ayudantes fueron recibidos a plomo limpio, y en medio de la desesperación, respondió a la agresión, suscitándose posteriormente un intercambio de disparos entre ambos grupos.
Se trató de “una lluvia de tiros“, e incluso se paralizó el desplazamiento de vehículos que a esa hora circulan por la ARC. Uno de los proyectiles impactó en la cavidad craneal de Pacheco Rivas, causándole un derramamiento de sangre.
Con la ayuda del personal, el herido fue trasladado inicialmente a una clínica privada, en La Victoria, pero allí no contaban con especialistas y de inmediato lo refirieron al Benítez. Falleció poco después, ya que la trayectoria balística le ocasionó exposición de la masa encefálica.
ALLANAMIENTOS
Luego del suceso, comisiones de la Base de Homicidios de La Victoria e igualmente de la Subdelegación de Las Tejerías se trasladaron al lugar, iniciando las averiguaciones del caso y tomando declaraciones de los trabajadores del empresario y transeúntes, así como también colectando las evidencias.
Ayer en la mañana, los investigadores, bajo la tutela del comisario Edgard Hernández, jefe de Homicidios, se desplazaron nuevamente a ese tramo vial, realizando la planimetría y practicando varios allanamientos tras la captura de los implicados.
Se maneja información de manera extraoficial que los homicidas pertenecen a una banda de antisociales que mantiene al acecho a los transeúntes de la ARC después de las 9:00 de la noche. Los tipos incursionan en el municipio Santos Michelena y sectores circunvecinos.
LAMENTARON MUERTE DEL “CATIRE”
Por otro lado, vale precisar que Elbert Antonio Pacheco, conocido popularmente como “El Catire“, fue un comerciante muy próspero en La Victoria, quien en vida se dedicó al trabajo por la comunidad ribense, apoyándola de manera desinteresada en cualquier inconveniente que se le pudiese estar presentando en el transcurrir del tiempo, dándoles así a muchos un respiro en sus padecimientos.
Y desde hace por lo menos diez años, el peregrino comerciante se encargó de conocer las necesidades de la población, creando de esa forma la “Misión Catire“, cuya función era la de brindar apoyo a un aproximado de tres mil adultos y adultas mayores a la hora de cobrar sus pensiones, ofreciéndoles mayor comodidad, facilitándoles sillas, toldos, comidas y bebidas. Contribuía con la distribución de medicamentos a quien lo necesitara.
A la luz de esta misión, también se encargóde captar a jóvenes en situación de calle y proporcionarles no sólo alimentos sino fuentes de empleo a lo largo de toda la capital de la juventud, ya sea en comercios o puestos de comida, donde se expendía la misma a precios justos.
En este sentido, su labor social no quedó ahí, pues fue el encargado de rescatar el conocido parque victoriano Los Libertadores, allí acondicionó las atracciones y aunado a esto con el apoyo de la comunidad, fundó una especie de zoológico de contacto para los más pequeños, de manera de que fuese una ventana de recreación en medio de la movilidad de la ciudad.
En los últimos años había tomado la tarea de alimentar a los pequeños en situación de calle, en la medida de sus posibilidades, es decir, Pacheco, fue un filántropo que tomó el municipio Ribas.
NOTICIA DE IMPACTO
Tras conocerse el desenlace de su muerte, desde muy tempranas horas de la madrugada, personas de distintos rincones de La Victoria comenzaron a congregarse en las afueras del Hospital José María Benítez.
Se trataban de niños de situación de calle, pensionados y algunos con dificultades motoras se acercaron a los predios del centro asistencial. Comentaron los testigos que era mucha gente que quería verlo de cerca y darme su pésame. Consideraron que la Ciudad de la Juventud amaneció de luto tras la muerte del “Catire” a manos de los sanguinarios de la Autopista. Hoy le rendirán todos los honores al samaritano de Ribas.
LUIS ANTONIO QUINTERO | elsiglo
fotos | FAUSTINO PÉREZ
