El obispo de Maracay, Monseñor Rafael Conde, lideró ayer la Misa Crismal en la Catedral de la ciudad, con la presencia de todos los presbíteros que hacen vida en la Diócesis, en cuyo encuentro renovaron su compromiso religioso. Con la colectividad.
Monseñor Conde describió la jornada de fe como un día de jubiló para la feligresía aragüeña, en la cual se consagra el Santo Crisma y se bendicen los demás oleos, en el marco de la comunión de los sacerdotes.
La palabra “crisma” es griega y significa un ungüento aromático, mezcla de aceite y bálsamo oloroso, con el que se unge o se da masaje. Viene del verbo “chrío”, ungir, que ha dado origen al término “christós”, “El Ungido“, equivalente a su vez a “Mesías” en hebreo: (“Dios le ungió con el Espíritu Santo y con poder”; Hechos 10, 38), y por derivación al de “cristianos”, ungidos, pertenecientes al Ungido.
En este sentido explicó que “se llama Misa Crismal porque se utiliza para bendecir los oleos, y consagrar el crisma, estos oleos son los que se utilizan en algunos sacramentos; el óleo de los catecúmenos, que se utiliza para el bautismo, el de los enfermos, en cual se utiliza para personas con avanzada edad, además del crismas”.
Monseñor profundizó en el significado de la tradición, indicando que “el crismas es un óleo que va mezclado con aroma y se utiliza tanto en el bautismo como en la confirmación, en el orden sacerdotal, en el cual los presbíteros son ungidos en las manos y el obispo en la cabeza, y también para la consagración de iglesias y de altares”.
Por otro lado, “es una misa de mucha importancia, ya que todos los fieles participan como representantes de sus respectivas parroquias, en el cual todos se llevan sus oleos consagrados a sus respectivas iglesias“.
LOS SACERDOTES RENUEVAN SUS VOTOS
Cabe destacar que en la jornada los presbíteros aprovechan la ocasión para renovar las promesas que hicieron el día de su ordenación sacerdotal, en este sentido, se trata de una comunión entre el obispo y los sacerdotes de la Diócesis.
Durante la homilía, el Obispo de Maracay pidió por las personas que requieren de atención médica, y por los más desfavorecidos, argumentando que “todas las iglesias católicas y Cáritas están trabajando para llevar medicamentos y alimentos a quien lo requiere, con la donación de particulares, en su mayoría de venezolanos que se encuentran en el exterior”.
“LA AYUDA HUMANITARIA ES NECESARIA”
Con respecto al tema de la entrada de ayuda humanitaria al país, monseñor Rafael Conde afirmó: “la ayuda humanitaria es urgente en Venezuela, hay mucha gente que necesita de esto, por eso exhorto al Gobierno de Nicolás Maduro a que permita la entrada al país” de dichos insumos.
En este sentido sentenció: “Cáritas solo participará en la distribución de estas ayudas, en cuanto a los insumos que lleguen a la Nación, si no se politiza esta acción“.
JOSÉ CARPIO G | elsiglo
foto | JOSÉ RAMÓN GONZÁLEZ
