En medio de la imprecisa aplicación de los bloques del racionamiento, los comerciantes siguen empeñados en su misión de sobrevivir a esta crisis eléctrica a como dé lugar.

Es común ver en el centro de Maracay, que unos tramos de la avenida Bolívar están energizados, pero inmediatamente hay un tramo sometido a la inefable “administración de carga”.
Un encargado de charcutería, quien solo se identificó como Richard, explicó que “el problema eléctrico nos ha mantenido atados, estamos trabajando a media máquina hasta que se nos apague la planta”.

Por su parte, Endimar Salazar, empleada de una frutería, relató: “se acaba de ir la luz. Así estamos trabajando con esta problemática. La planta está funcionando, pero funcionamos a un cuarto de máquina en las ventas y en el negocio”.
Otros comerciantes han apostado por trabajar toda la jornada laboral, a pesar de la situación, manteniendo la esperanza de que se normalice en cualquier momento la actividad comercial.
Al respecto, Maximiliano Torrealba destacó: “nosotros aquí en la farmacia estamos trabajando a tiempo completo, con las idas y venidas de luz, estamos en ese constante cambio entre la energía de la calle y la planta”.

JOSÉ CARPIO G | elsiglo
foto | CRISMAR RANGEL (PASANTE)