Degollaron a un abuelito para robarle dos dientes de oro

Luego de las declaraciones de familiares ante los investigadores del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, adscritos a la Base de Homicidios de San Pablo, con sede en Turmero del municipio Mariño, se determinó que el móvil del crimen cometido contra un septuagenario a eso de las 6:00 de la mañana del martes en la jurisdicción de Santos Michelena, se orienta hacia el robo.

 

El cadáver de Guido Lorenzo Camejo fue trasladado a la Morgue de Caña de Azúcar

Los hampones, poco antes de las seis de la mañana, ingresaron a la morada de la víctima, identificada como Guido Lorenzo Camejo, de 70 años de edad, en el sector Morocopo y lo sometieron bajo amenazas de muerte.

Como se resistió a la acción delictiva, uno de los delincuentes, con un filoso cuchillo, le cortó la yugular, causándole la muerte casi de manera inmediata.

Luego de visualizarle dos piezas dentales de oro, los malvivientes procedieron a extraerle de la cavidad bucal con herramientas rudimentarias una prótesis e inmediatamente le desprendieron dos dientes.

Investigando en el mercado el costo del referido metal, se tuvo información que un gramo de oro, de 18 kilates se ubica en unos 85 mil bolívares. Y se presume que el abuelo llevaba en su boca unos seis gramos.

Posteriormente los ladrones se dirigieron a las habitaciones, apoderándose posteriormente de un dinero que tenía el anciano disponible para comprar cosas personales y comida, según la información trascendida a los periodistas.

Aunque no hubo información oficial, los sospechosos podrían estar identificados en el transcurso de las próximas horas y se sospecha que ellos conocían a su víctima, pues lograron los objetivos planificados. No se descarta que habiten en la comunidad de Morocopo.
En resumen de cuentas la justicia los espera con las manos abiertas y tendrán que rendir cuentas ante lo sucedido en el referido sector de Las Tejerías.

La vecindad se mostró consternada ante lo ocurrido a Lorenzo Camejo y emplazó a los investigadores de la policía científica a dar con el paradero de los culpables. El viejo, como lo conocían así, era muy querido y apreciado por todos.

Por su parte, los familiares que se apersonaron en la mañana de ayer al Servicio de Medicina y Ciencias Forenses, con sede en Caña de Azúcar, en medio de su tristeza, no ofrecieron declaraciones a los periodistas de sucesos.

 

LUIS ANTONIO QUINTERO | elsiglo
foto | RAFAEL SALGUERO