La primera ministra británica, Theresa May, aseguró el martes que Reino Unido necesita una nueva prórroga de la fecha del Brexit para encontrar una solución al bloqueo.
Asimismo, propuso al líder de la oposición, Jeremy Corbyn, que se sienten a buscarla juntos.
Además, casi tres años después del referéndum de 2016 y cuando Reino Unido ya superó la fecha fijada inicialmente para el Brexit -29 de marzo de 2019-, los británicos siguen sin saber qué les depara el futuro inmediato.
El Tratado de Retirada
Por su parte, el Tratado de Retirada que la primera ministra firmó con Bruselas fue rechazado tres veces por el Parlamento, pero los diputados tampoco lograron ponerse de acuerdo sobre ninguna opción alternativa.
Es por ello, ante esta situación, May convocó el martes un maratoniano consejo de ministros que duró siete horas, al término del cual anunció su decisión.
“Sé que algunos están tan hartos de las demoras y de los interminables debates que les gustaría salir (de la UE) sin un acuerdo la semana que viene“, afirmó, pero “irse con un trato es la mejor solución”.
“Por lo tanto, necesitaremos una nueva ampliación del Artículo 50 (del tratado europeo, que fija la fecha de salida, ndlr), que sea lo más breve posible y que concluya cuando aprobemos un acuerdo”, agregó.
Y, afirmando que la división reinante en el Parlamento y en el país “no puede durar mucho más”, propuso para romper el bloqueo “sentarme con el líder de la oposición y tratar de acordar un plan -que ambos respetaríamos- para garantizar que abandonamos la Unión Europea y que lo hacemos con un acuerdo”.
Una invitación que el laborista Corbyn, líder de la principal fuerza de la oposición, aceptó inmediatamente.
Partido Laborista
“Reconozco mi responsabilidad de representar a las personas que votaron al Partido Laborista en las últimas elecciones y a las personas que (..) quieren certitud y seguridad para su futuro, y esa es la base sobre la que nos reuniremos y mantendremos esas conversaciones”, afirmó.
Dicho plan, precisó May, tendría que ajustarse al Tratado de Retirada, que los líderes europeos no están dispuestos a reabrir. Por lo que el margen de negociación se centraría en la futura relación que Londres quiere construir con la UE, subrayó.
“La UE no puede ser rehén a largo plazo de la resolución de una crisis política en Reino Unido”, dijo este martes el presidente francés, Emmanuel Macron, durante un encuentro con el primer ministro irlandés, Leo Varadkar, en París.
Este por su parte, dejó muy claro que Irlanda no quiere convertirse en “la puerta trasera” que facilite a los británicos acceder al mercado europeo en caso de un Brexit sin acuerdo, al mismo tiempo que reiteró su oposición al regreso de una frontera entre la provincia británica de Irlanda del Norte y su país.
Los mandatarios europeos deben reunirse de nuevo el 10 de abril en Bruselas. May debería pedirles previamente el nuevo aplazamiento y ellos decidirán entonces si se lo acuerdan o no.
Consejo Europeo
El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, respondió con prudencia al anuncio el martes de la líder británica afirmando: “Incluso si, tras lo de hoy, no sabemos cuál será el resultado final, tengamos paciencia”.
La primera vez que el Parlamento rechazó el acuerdo negociado por la primera ministra, el 15 de enero, esta perdió por 230 votos. La segunda, el 12 de marzo, May redujo su desventaja a 149 y el pasado viernes fue derrotada por solo 58 votos.
Pero la líder conservadora, que llegó incluso a proponer su dimisión para obtener el apoyo de los más recalcitrantes euroescépticos dentro de su partido, se ha quedado sin argumentos para ganar respaldo entre los diputados conservadores rebeldes.
Opositor Laborista
Por eso tiene que tender la mano al opositor Partido Laborista si quiere evitar una salida brutal que tendría catastróficas consecuencias económicas.
Un Brexit sin acuerdo es “cada día más probable”, dijo el martes en Bruselas el negociador europeo para el Brexit, Michel Barnier.
Y mencionó precisamente como posibilidad para conceder una larga prórroga del Brexit que los políticos británicos necesitaran tiempo para alcanzar un consenso sobre la futura relación entre Reino Unido y la UE.