La noche en la que todos los focos estaban situados en la portería del Chelsea, por la titularidad de Caballero -la primera en toda la temporada- en detrimento del castigado Kepa, emergió otro español, Pedro Rodríguez, para encarrilar una victoria de prestigio a un Chelsea que parecía vagar por la temporada en el último mes.
El segundo gol del partido fue obra de Trippier en propia meta.
El canario abrió el marcador y el meta español se quedó en el banquillo
El canario abrió el marcador del derbi de Londres con su gol y fue el mejor de los suyos en un partido raro de los blues.
Raro por darse en esta parte de la temporada y no al principio, cuando parecía que el proyecto Sarri arrancaba con fuerza y no había perdido todo el fuelle con el que ha llegado a este febrero negro; en el que ha caído goleado ante el City (6-0) y eliminado de Copa (United, 0-2) y perdió la final de Copa de la Liga ante el propio conjunto citizen en una tanda de penaltis que tuvo a Kepa como gran protagonista al negarse a abandonar el campo y dejar enfrentarse a la tanda a Caballero, hoy titular.
El conjunto de Sarri funcionó a la perfección a lo largo de todo el partido. De hecho, a los siete minutos Higuaín golpeó el poste de la meta de Lloris, como si de un aviso de intenciones se tratara.
Con Azpilicueta realizando un tremendo partido secando a Harry Kane, el nombre del defensa español quedó marcado en las estadísticas al asistir a Pedro en el primer gol del partido. El canario recogió el balón y se fue con facilidad de Alderweireld para anotar el primer tanto del partido. en el 57′.
Antes, Higuaín lo intentó, pero su tanto en el 53′ fue anulado por fuera de juego del delantero argentino. Acabó siendo sustituido por Giroud en el 84‘, tras un gran partido. En la siguiente jugada, Trippier y Lloris evidenciaron una falta de entendimiento encajando un tanto rídiculo, pues el defensor realizó un pase al portero cuando este subía a apoyarle. El balón acabó dentro. 2-0 y partido para el Chelsea.
Esta victoria es la segunda en los últimos cinco partidos ligueros para los de Sarri.
