En Villa Puntica viven de las bondades del lago Los Tacarigua

Pobladores de Villa Puntica, viven en medio de muchos problemas de servicios públicos y de abastecimiento, pero al menos tienen al lago Los Tacarigua, como una de las mayores bendiciones de la naturaleza, ya que gracias a este reservorio muchas familias se alimentan y llevan el sustento diario a sus hogares.

Importante precisar que el lago tiene una extensión de 344 kilómetros, entre sus orillas se levantan dos de las ciudades más importantes del país como son Maracay y Valencia, y otros centros urbanos importantes como Mariara, San Joaquín, Güigüe, Guacara, Los Guayos y Palo Negro.

Paleo de la pesca

En el municipio Zamora, antes de entrar a Magdaleno, se encuentra muy adentro esta comunidad que está sumida en un mar de calamidades en cuanto a vialidad y servicios públicos; no cuentan con cloacas, alumbrado público, ni recolección de basura.
No obstante las dificultades, los residentes afirman que Dios es noble con quienes viven a orilla del lago, porque éste ha sido, de generación en generación, una fuente de empleo para los que allí residen.
La pesca es una de las actividades económicas de Villa Puntica y todos los pobladores se benefician de esta forma de vida, ya que algunos lo utilizan para la venta y otros para el consumo propio.
Según comentaron, muchas personas de ciudades y pueblos aledaños como Palo Negro, Magdaleno, Güigüe y hasta de Maracay, llegan al sector para hacer compras de estas especies lacustres.

LA PESCA

Entre las especies que se dan en el lago hay tilapia, guabina, San Pedro, bagre y tortugas, que son el deleite de los compradores y consumidores.
Las formas de pescas de estos lancheros varían según la especie que busquen o que en ese momento prolifere en las aguas dulces.

La tilapia y la guabina se sacan con el chinchorro y paleo, que consiste en darle con un palo al agua para que el pez salga de la bora y poder capturarlo.
La otra forma de pesca es con el chinchorro, que es una maya con plomo que se lanza al agua, luego se recoge y allí vienen los peces enredados.
Otros de los peces que ofrece el lago es el bagre, que se pesca con anzuelo, al igual que la tortuga: otras especies que allí habitan son patos y babas, que se pueden obtener cuando se enredan en las mayas o se cazan con rifles.

HABLARON LOS PESCADORES

Rafael Medrano, pescador, indicó: «el lago es lo que nos da el sustento diario, nosotros pescamos, los muchachos lo compran y luego lo venden o lo cambian por comida. Una tilapia por un kilo de harina por ejemplo».
Medrano comentó, «en otros tiempos aquí se sacaba bastante pescado, hoy en día sacamos de 30 a 40 pescados diarios y eso es el que nos da de comer por lo menos dos semanas».
Entre tanto, otros pescadores acotaron: «yo toda mi vida he consumido este pescado desde que tengo 7 años de edad, ya voy pisando los 45 y aún estoy aquí vivito y coleando; muchas personas quieren malponer este producto y resulta que no es así».
Ellos aseguran que hay jóvenes de la barriada que salieron de la delincuencia para ponerse a trabajar en la pesca; hoy en día son muchachos de bien que están produciendo para sus familiares y son sostén de hogar.
Los productos que son sacados de la laguna son expendidos en la comunidad de Villa Puntica a precios solidarios, abasteciendo así de pescado y de otras especies a la población.
Entre las casas de zinc y ranchitos improvisados se encuentran muchas siembras de distintas frutas, tubérculos y granos, que son el complemento de la comida que les provee el lago a los habitantes del poblado.
Algunos de sus habitantes aseguraron, «a veces dura bastante para que llegue el CLAP al sector, pero gracias al lago y a las siembras que nosotros tenemos podemos solucionar nuestro problema de comida. Este lago es una bendición».

La hora de la pesca o de actividad en las aguas dulces de Los Tacarigua, es a partir de las 6:00 de la tarde, donde jóvenes, niños, adultos, saltan a la travesía de la pesca en busca de sus alimentos y de una entrada de dinero para solventar en sus casas la situación económica.
A las 11:00 de la mañana del siguiente día vienen de regreso los pescadores con los tobos llenos y se los reparten entre ellos.
Los habitantes de Villa Puntica y los pescadores del sector piden al Gobierno Nacional que se les apoye con la adquisición de más insumos para sus labores de pesca.
Los trabajadores de la laguna recalcaron, «nosotros hemos recibido un aporte por parte del Gobierno a través de un proyecto que les presentamos, pero cuando se hizo efectivo no lo recibimos, pues ya estaban los precios comidos por la inflación».
JOSÉ R CARPIO G. | elsiglo
fotos | JOSÉ RAMÓN GONZÁLEZ