Una de las claves para qué la pareja funcione es, ¡el deseo!
Realmente, desear a una persona puede darse en el ámbito afectivo y sexual, aunque para muchos no es algo que esté ligado de por sí.
En este caso, hablaremos de esas parejas que sí se desean y son capaces de hacer que su felicidad no se base en eso únicamente, pero que sí que les gusta desear y sentirse deseados.
¿Por qué es importante o incluso fundamental para una pareja feliz y duradera?
Atractivo físico.
Cuando decimos esto, podemos estar pensando en tener unos cuerpos fornidos y espectaculares, y ser muy guapos ‘de cara’.
Sin embargo, el atractivo físico no tiene nada que ver con los estereotipos o estándares que tiene la sociedad.
Podemos ser poco agraciados si nos comparan con alguien bello, pero muy atractivos físicamente gracias a nuestra manera de vestir, a la manera que tenemos de hablar o comunicar…
Y eso muchas veces puede causar más deseo en nuestra pareja que la cara o el cuerpo que nos ha dado la vida.
Desear y ser deseados.
Independientemente de lo que nos atraiga de la persona con la que pasamos nuestra vida, el sentir que esa persona nos desea y que al mismo tiempo deseamos es algo único.
Puede terminar en relaciones sexuales, o simplemente causar una atracción que haga que la pareja permanezca junta además del amor.
El deseo sexual.
No todas las parejas necesitan tener relaciones sexuales para amarse.
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Sin embargo, si el caso es que queréis compartir la intimidad del sexo, su buena frecuencia hará que os unáis mucho más.
Al fin y al cabo, en una pareja estable que se quiere y se respeta, hay pocas cosas más íntimas que las relaciones sexuales.
