Los gatos no son antisociales

¿Son los gatos antisociales? En este sentido, por lo general, las personas acostumbran a ver a los gatos como unos animales aislados que adoran la independencia y que en raras ocasiones muestran su cariño con los dueños. El caso es que quien ha tenido un gato como mascota sabe que esto no es siempre así y ahora es la ciencia la que les da la razón.

En base a los resultados de un estudio realizado recientemente, los gastos tienen mayor sociabilidad de lo que muchos piensan, solo hay que dar el primer paso y darles la atención que precisan.

Los gatos pueden ser muy cariñosos

El estereotipo de que los gatos son animales que rechazan el contacto humano existe, pero lo cierto es que pueden llegar a ser tan cariñosos como un perro.

A esta conclusión se ha llegado después de que un equipo de investigadores de la Universidad Estatal de Oregón llevara a cabo un experimento. En este sentido se llegó a trabajar con 46 gatos, 23 domésticos y 23 que provenían de un refugio para animales. Se observó desde cerca la interacción que mantenían con los hombres.

Por cada ensayo que se producía, un gato y una persona se colocaron en una habitación. En los dos primeros minutos del experimento, las personas tenían que ignorar a los gatos. En los dos minutos siguientes las personas podían interactuar libremente con ellos llamándolos por su nombre o dándoles caricias.

Así fue como se observó que los gatos pasaban más tiempo con las personas si se les prestaba atención. Los felinos por lo tanto, se interesaban por las interacciones. Incluso alguno de estos gatos preferían interactuar con las personas en vez de jugar o comer.

Romper el hielo, la clave

Se sugiere que la clave que existe para poder interactuar más con los gatos sería ser nosotros quienes demos el paso y llamemos su atención.

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Después de haber llevado a cabo el experimento, los investigadores mantienen esta opinión, aunque pesa mucho la creencia de que los gatos no son animales sociales, por lo que muchas personas se resisten a interactuar con ellos.

Lo que puede, según los investigadores, distinguir el comportamiento de los gatos con los de los perros, es que ellos prefieren tener la libertad de elección a la hora de detener el contacto con los humanos cuando así lo desean. De todas formas, esto va a depender de la personalidad que tenga el animal y su crianza. Aquí los gatos prefieren estar con personas que les resulten familiares.