Vías de acceso delimitadas por aguas residuales, basura y un penetrante hedor a pestilencia son algunos de los problemas con los que deben lidiar los habitantes de la calle 19 de Abril de San Mateo, municipio Bolívar, quienes se encuentran afectados desde hace varios meses por estos focos de contaminación.
En este sentido, los habitantes indicaron que los charcos son sinónimo de un elevado número de proliferación de enfermedades que afectan tanto a niños como adultos, quienes viven constantemente padeciendo enfermedades de la piel y producidas por la picadura de mosquitos.
Con pozos de aguas residuales deben vivir en el sector sanmateano
Marisol de Caripa, residente de la zona, manifestó ser una de las principales afectadas por este inconveniente, pues la obstrucción en las tuberías de aguas residuales de las calles, al parecer colapsaron las bocas de visita y por consiguiente hay un bote que atenta contra la salud de sus familiares.
“Eso lleva mucho tiempo, ya vamos para seis meses, hemos hecho de todo para paliar el problema, pero no hemos podido conseguir una solución efectiva, casi siempre son pañitos de agua tibia. Es realmente preocupante que debamos vivir en medio de la insalubridad. En diciembre arreció el asunto y debimos nosotros mismos romper para poder medio solucionar”, comentó Caripa.
Igualmente informó que hace pocos días estuvieron unas personas chequeando lo que sucede en su casa y en el sector, por lo que se mantienen esperando a que finalmente se solvente toda esta calamidad. “Por allí vino una ingeniera y estuvo tomando fotos por toda la calle, porque no solamente soy yo, hay otras casas que sucede lo mismo”, dijo.
De acuerdo con la denuncia, Roberto Timaure agregó: “Esta calle apesta por donde quiera que pases, son pozos y pocitos los que debemos estar saltando y ni contar la plaga que se mete a nuestros hogares. Estoy a la expectativa con las respuestas que nos pueda dar la municipalidad, porque ya vinieron a ver, Dios quiera nos ayuden”.
Para finalizar, los vecinos hicieron un llamado a las autoridades gubernamentales de la jurisdicción y al personal de Hidrocentro para que se aboquen a darle una salida a este dolor de cabeza que cada vez se torna más insostenible.
