ohemian Rhapsody, el polémico biopic sobre el cantante de Freddie Mercury, ha sido un inesperado éxito de taquilla y una de las películas ganadoras en los Globos de Oro 2019. Para celebrarlo, la Guardia Real del Palacio de Buckingham decidió interpretar el lunes 7 de enero la canción de Queen que da nombre a la película ante los turistas que se encontraban ante la entrada del edificio.

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El usuario de Twitter Frosty compartió ese mismo día el vídeo en el que se puede ver a la banda de los Guardias Granaderos británicos tocando la canción. El tuit, que supera las 274.000 reproducciones, es solo uno de los que se han compartido en la red social, obteniendo miles de “me gusta”.

El cambio de guardia del palacio, que ocurre por las mañanas, es una de las atracciones turísticas más visitadas en la capital británica. En esta ocasión, celebraban los dos Globos de Oro que la película dedicada a Mercury acababa de ganar: mejor drama y mejor actor protagonista de drama (Rami Malek).

Bohemian Rhapsosy, estrenada en noviembre de 2018, ha recaudado hasta el momento 750 millones de dólares (650 millones de euros) en todo el mundo. Son cifras de taquilla similares a las de las superproducciones de superhéroes como Deadpool y Guardianes de la Galaxia.

Los inicios del proyecto no auguraban tal éxito. Su director, Bryan Singer, fue despedido a mitad de rodaje por los conflictos con su actor principal y las críticas a la película no fueron muy favorables durante la semana de su estreno, al mostrar una versión edulcorada de la vida de Freddie Mercury.

Otros homenajes musicales

No es la primera vez que alguno de los cinco regimientos de la Guardia Real británica rinde un tributo musical en la entrada principal del Palacio de Buckingham. De hecho, es una práctica común. Ocurrió en agosto de 2018, el día del funeral de Aretha Franklin, cuando los guardias galeses hicieron una versión instrumental de su éxito R.E.S.P.EC.T.

Inglaterra logró en la Copa del Mundo de 2018 su mejor clasificación en la competición en casi 30 años. El clásico del britpop Three Lions, compuesto en los años 90 y convertido en el himno de la selección inglesa, resucitó durante la buena racha del equipo y sonó también en el palacio londinense.

También suele sonar desde hace décadas el Dancing Queen de Abba, simplemente por ser una de las cancines favoritas de la Reina Isabel II.