Un joven que respondía al nombre de Kelvin Alejandro Díaz Urbano, de 26 años de edad, y domiciliado en la calle 14, casa número 16 del barrio Belén en la ciudad de Maracay, murió a consecuencia de heridas de proyectiles en un hecho de sangre que la familia rechaza de plano.
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Los denunciantes señalaron que el ciudadano se ganaba la vida ejerciendo la función de barbero para mantener a sus tres chamos y era muy conocido en ese sector de la ciudad.
Este lunes, luego de culminar con sus obligaciones, Díaz se dirigió a la casa a descansar y a eso de las 7:00 de la noche, se presentaron cuatro personas en una camioneta portando armas largas.
Seguidamente, según los declarantes, los supuestos funcionarios obligaron a las personas a ingresar a sus respectivas moradas y poco después conminaron al ciudadano a montarse en la camioneta.
Y en la madrugada de ayer les llegó la noticia que el barbero había muerto en un supuesto enfrentamiento en Mata Redonda. “Desconocemos el sitio exacto donde lo mataron”, afirmaron.
Apuntaron que “nuestro familiar no portaba armamento ni mucho menos tenía cuentas pendientes con la justicia, presienten que los sujetos vestidos de negro se confundieron”.
Y para “aliñar la escena del suceso”, los presuntos guardianes del orden público le habrían sembrado un arma de fuego para aparentar un enfrentamiento. Hay muchos testigos pero tienen miedo de ofrecer declaraciones.
Finalizaron diciendo que el cuerpo de la persona está aquí en la Morgue de Caña de Azúcar y ahora quién responde por los daños causados a una persona de buena conducta.
LUIS ANTONIO QUINTERO | elsiglo
fotos | FAUSTINO PÉREZ
