América Latina enfrenta el riesgo de una ola xenofóbica contra los migrantes venezolanos, a los que algunos acusan de desplazar a la mano de obra local, advirtió este viernes un especialista de la Organización Internacional de Trabajo (OIT).
La discriminación contra los jóvenes venezolanos que buscan empleo en otros países latinoamericanos “es una amenaza latente”, dijo a la AFP el español Guillermo Dema, especialista regional en empleo juvenil y migración laboral de la OIT.
Según la Organización de Naciones Unidas (ONU), 1,9 millones de venezolanos han abandonado su país desde 2015 por la situación que atraviesa.
Países como Colombia, Perú, Chile, Brasil o Panamá han recibido grandes cantidades de venezolanos, en su mayoría jóvenes que en muchas ocasiones viajan en condiciones infrahumanas.
Datos de la OIT indican que 67% de los venezolanos en Perú tiene educación superior, al igual que 38% de los que están en Brasil y 33% de los que se encuentran en Colombia. Además, 70% de los venezolanos estaría de manera irregular en Ecuador, así como 68% en Colombia y 63% en Brasil.
De acuerdo con Dema, la “mayoría” de los jóvenes venezolanos que emigran de su país tiene una “formación superior” a la población de los países de acogida, especialmente los andinos. Esta mano de obra venezolana calificada “está cubriendo determinados nichos de mercado que es difícil de cubrir en los países que los están acogiendo”, según Dema.
