Sánchez y Macron sellan una alianza ante inmigración y reforma de zona euro

El jefe del Gobierno español, Pedro Sánchez, y el presidente francés, Emmanuel Macron, sellaron hoy en Madrid una alianza para hacer prosperar en la UE soluciones ante la inmigración ilegal y acordar medidas que refuercen la zona euro para estar preparados ante crisis futuras.

Sánchez recibió a Macron en el Palacio de la Moncloa (sede de la Presidencia del Gobierno español) en la que ha sido la primera vista a España del presidente francés, y ambos comparecieron en una conferencia de prensa previa antes de asistir a una cena ofrecida por el Rey Felipe VI en el Palacio Real.

Sánchez recalcó los valores y principios que unen a España y Francia y subrayó la determinación de ambos de hacer frente a retos que tiene ante sí la UE como la inmigración y el futuro de la zona euro.

Sánchez y Macron mostraron estar en buena sintonía

Son dos cuestiones que han sido objeto de sendas declaraciones suscritas por Sánchez y el presidente francés y que el jefe del Gobierno ha puesto especialmente en valor.

En materia migratoria, Sánchez resaltó la necesidad de afrontar el problema con solidaridad y responsabilidad, así como aumentar la cooperación con los países origen y tránsito de la inmigración ilegal.

De la misma forma, indicó que siempre ha de tenerse muy en cuenta la dignidad y los derechos humanos de los migrantes.

Macron advirtió de que las “soluciones nacionalistas” ante los flujos migratorios “sólo han tenido éxito a corto plazo”, y abogó por la cooperación europea como única vía eficaz para abordar este problema. “La única vía es la cooperación desde el punto de vista humano”, remarcó.

La inmigración, reconoció, es actualmente “objeto de una crisis política de distintas etapas” ante la cual sólo cabe actuar desde la solidaridad y en coordinación con los países africanos de procedencia, señaló.

Por otro lado, Macron valoró el diálogo entre Estados Unidos y la Unión Europea, pero rechazó la negociación de un “amplio acuerdo comercial” ante la actual falta de un contexto de equilibrio y reciprocidad.

Macron se refirió así al acuerdo comercial anunciado por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, ante el que el Gobierno francés ya había expresado sus reticencias.

“Tenemos dudas que aclarar con nuestros socios. No estoy a favor de empezar a negociar un amplio acuerdo porque el contexto no lo permite”, aseguró.

“La conversación es útil, porque rechaza la tensión y nadie quiere una guerra comercial, pero el buen diálogo comercial sólo puede basarse en una relación de equilibrio y reciprocidad, y en ningún caso bajo la amenaza”, advirtió Macron.

Sánchez apostó por el multilateralismo y defendió el diálogo con Estados Unidos pero, al mismo tiempo, la retirada de aranceles que, por ejemplo, salvaguarde la política agraria común.

Respecto a la declaración sobre la reforma de la zona euro, Sánchez aseguró compartir la “obsesión” del presidente francés para avanzar en la unión económica y monetaria y lograr, por ejemplo, un presupuesto de la zona euro.

Para él, se trata de pertrechar a las sociedades de mecanismos útiles y eficientes para poder hacer frente a crisis que puedan venir en el futuro.

El presidente francés, por su parte, abogó por celebrar reuniones continuas de los líderes europeos para poder tener un plan común el próximo mes de diciembre.
En el contexto económico, Macron insistió en su defensa de gravar con impuestos a las empresas digitales.

EFE