De cuatro balazos ultimaron a comerciante en Brisas del Lago

Luego de resistirse al robo de un celular y una laptop, varios individuos dieron muerte a un comerciante tras efectuarle cuatro disparos en distintas partes del cuerpo, y el crimen como tal causó consternación y repudio entre los habitantes del barrio Brisas del Lago, al sur de la ciudad de Maracay.

Familiares, quienes hicieron acto de presencia en la Morgue de Caña de Azúcar para tramitar lo relativo al retiro del cadáver, informaron a los periodistas que el crimen ocurrió a las 12:30 de la madrugada de este jueves en la calle Paraíso cruce con la Falcón de la citada comunidad.

Hilda Brito, tía, en medio de su dolor y con sus ojos humedecidos por las lágrimas, identificó a su pariente como Edgar Alexander Bravo Breto, de 41 años de edad, quien residía en la calle Paraíso.

Dijo que la víctima, de oficio comerciante, dejaba en la orfandad a dos hijos, uno de 19 años y otro de 14 años.

Comentó que Bravo Breto salió desde tempranas horas de la noche del miércoles a un sector cercano de su vivienda para conectarse por wifi, pues se dedicaba a la venta y compra de automóviles, así como a cualquier otra actividad comercial que le generara dinero de una manera honrada.

Transcurridas varias horas, «mi sobrino regresó a la casa a dormir y faltando unos 30 metros para llegar, lo interceptaron unos desconocidos para arrebatarle las propiedades, pero como se resistió, fue abaleado», dijo.

Seguidamente, los homicidas se llevaron un celular de tercera generación y una laptop; minutos después huyeron del lugar, «dejando a mi sobrino tendido sobre un charco de sangre».
«No hubo chance de trasladarlo a un centro asistencial, donde le prestaran los primeros auxilios», comentó la denunciante, quien agregó que Edgard Alexander estuvo entre 4 y 5 años en Panamá. Allá trabajó de comerciante.

Regresó a Venezuela porque consideró que en el país había futuro y lo que estamos viviendo los nacionales es transitorio. Apostó al futuro y lamentablemente encontró la muerte a manos de la delincuencia, señaló.

«Doy fe de que mi sobrino no era ningún delincuente o algo por el estilo, se trataba de un emprendedor», agregó. A través de los medios de comunicación social, la señora Hilda Breto exigió a los funcionarios del Cicpc investigar el caso. Su muerte no puede quedar impune.

Ahora el caso está bajo averiguación de los sabuesos de la Base de Homicidios de Maracay. Los expertos, bajo la conducción del comisario Cruz Vázquez, colectaron evidencias de interés criminalístico y asimismo tomaron declaraciones de posibles testigos para la elaboración de los retratos hablados. El caso podría estar resuelto en el transcurso de las próximas horas, pues un equipo multidisciplinario se abocó a las averiguaciones de rigor.

LUIS ANTONIO QUINTERO | elsiglo
fotos | FAUSTINO PÉREZ