De una manera cruel, sujetos aun por identificar por las autoridades policiales asesinaron a machetazos a un trabajador agrícola dentro del asentamiento campesino San Luís, ubicado en el callejón Rafael Quiroz, vía La Coromoto, municipio Francisco Linares Alcántara.
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Importante resaltar que según informaciones extraoficiales, junto al cadáver los homicidas dejaron una nota con un amenazante mensaje, sin que trascendieran el contenido concreto de la mortal misiva.
La víctima respondía al nombre de Julio Guerra, quien toda su vida se habría dedicó a la plantación de hortalizas para el sustento de su hogar.
Vecinos de la zona agrícola indicaron que el pequeño productor residía solo en su parcela y temen que se había ganado algunos enemigos al evitar el robo de las cosechadas que, con sudor y sacrificio, producían sus fértiles terrenos.
Al parecer Quiroz fue hallado muerto a las 11:00 de la mañana de ayer por uno de sus vecinos, quien se acercó a la parcela para informarle la llegada de la caja del CLAP.
Se supo que el vecino tocó con insistencia la puerta de la humilde residencia y al notar que el campesino no respondía a sus llamados, decidió asomarse por la venta, observando el cuerpo de Julio Guerra tendido sobre un charco de sangre en la sala de la vivienda.
Los nervios atacaron al visitante, quien salió despavorido para notificar a los vecinos sobre el hallazgo del cadáver, quedando todos estupefactos al acercarse igualmente a la parcela. De inmediato la noticia corrió por toda la comunidad hasta que llegó a las autoridades.
La gente se preguntaba el porqué Guerra habría sido asesinado, y sobre todo, en qué momento estos sujetos entraron a la parcela y asesinaron a su vecino, pues todos aseguraron no haber escuchado gritos o ruidos extraños durante el día o la noche.
Cuando llegaron los policías acordonaron el sitio hasta la llegada de la base de homicidios (Cicpc), que se encargó de efectuar las experticias del caso y el levantamiento del cadáver.
La víctima presentaba una herida de arma blanca (tipo machete) en la cabeza, y junto al cadáver fue localizada una carta, aparentemente dejada por los asesinos.
RAIZA VILLAFRANCA | elsiglo
