Rescatan a cerca de 600 inmigrantes que intentaban llegar a España

Casi 600 inmigrantes, entre ellos un elevado número de mujeres y niños, fueron rescatados hoy cuando intentaban llegar a las costas españolas a bordo de una veintena de embarcaciones precarias, conocidas como pateras, en un flujo incesante que se ha incrementado en la última semana.

Esa cantidad se suma a los 12.155 que entraron a España de manera irregular entre el 1 de enero y el 20 de junio de este año, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), que cifra en 292 los fallecidos en el intento en ese mismo periodo.

Los servicios de emergencia marítima iniciaron temprano las operaciones en aguas del Estrecho de Gibraltar, con el rescate de 264 inmigrantes, la mayoría mujeres, menores y bebés, a bordo de 16 embarcaciones, que fueron trasladados al puerto de Tarifa (Cádiz, sur).

Casi al mismo tiempo, Salvamento marítimo de España localizaba a otras 176 personas tras recibir una llamada telefónica desde dentro de una de las cuatro pateras en las que viajaban.

A estos se sumaron posteriormente también en esa zona otras 149 a bordo de tres embarcaciones.

Además, 129 inmigrantes que iban rumbo a la isla de Gran Canaria, en aguas del Atlántico, fueron rescatados tras pedir auxilio también por teléfono cuando se encontraban a bordo de un cayuco.

Entre los ocupantes de la embarcación, todos de origen subsahariano, viajaban dos mujeres y varios menores, todos en buen estado de salud.

Desde que hace una semana el buque Aquarius desembarcó a 630 inmigrantes en el puerto de Valencia, los servicios marítimos de la Guardia Civil española han rescatado a más de un millar de personas, y las autoridades esperan una avalancha similar a la de anteriores épocas estivales debido al buen tiempo y las condiciones favorables en el mar.

España es la tercera puerta de entrada de inmigrantes irregulares por vía marítima en la Unión Europea, por detrás de Italia y Grecia.

La Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas (Frontex) estima que en el primer cuatrimestre de 2018 llegaron 4.600 personas en situación irregular a España, la mayoría procedente de Marruecos y Malí, lo que supone un aumento de 95 personas en relación al mismo período del año anterior.

Sólo en el mes de abril, lo hicieron cerca de 1.100 cruzando el Mediterráneo desde el norte de África, por una ruta conocida como del Mediterráneo occidental.

Según Frontex la tendencia creciente de llegadas de inmigrantes irregulares a España alcanzó su pico en 2017, año en el que se doblaron las de 2016, y su máximo histórico desde 2009, cuando la Agencia Europea de Aduanas comenzó a hacer balances sobre la inmigración irregular hacia Europa.

Unos números que la política de “puertos cerrados” y tolerancia cero a la inmigración irregular del nuevo Gobierno italiano puede ayudar a multiplicar si, tal y como pronostican las organizaciones humanitarias que trabajan sobre el terreno, ante la presión italiana las mafias del tráfico de personas, cambian el destino de Italia a España.

En lo que va de año, un total de 35.504 inmigrantes y refugiados han llegado a Europa en diferentes embarcaciones hasta el pasado 10 de junio, una cifra que sin embargo supone sólo la mitad en comparación con el mismo periodo del año pasado, según datos de la OIM.

Ante un futuro agravamiento de la crisis migratoria mediterránea, la Unión Europea celebrará mañana domingo Bruselas una cumbre informal para buscar puntos de consenso de cara al Consejo de los Veintiocho de la semana próxima, en el que se abordará este asunto.

En esa reunión, el presidente francés, Emmanuel Macron, y el jefe de Gobierno de España, Pedro Sánchez, además de la canciller alemana, Angela Merkel, propondrán a sus socios de la UE la creación de centros de desembarco “en suelo europeo” desde donde se gestione la situación de los inmigrantes y se les reparta a los países de Europa.

Fuente: Unión radio