El horror sacudió a quienes, el domingo, buscando acortar camino, se metieron por un terreno enmontado en el municipio Santa Rita. Sobre el monte estaba el torso y las piernas de un hombre. Más allá, los brazos y la cabeza.
Lo identificaron como Rubén Darío Gutiérrez Barboza, de 30 años. “Fue raptado y de forma macabra: lo desmembraron”, dijeron funcionarios policiales. Hallaron los restos a las 10:30 am de ese día, en la parroquia José Cenovio Urribarrí.
“A Gutiérrez se lo llevaron desde el centro de esa población y lo trasladaron a una zona enmontada de la autopista Lara-Zulia para cometer el asesinato. Allí lo descuartizaron”, dieron a conocer funcionarios policiales.
En la atroz escena del crimen se pudo apreciar, esparcidas por el sitio, las partes del cuerpo que fueron desprendidas de la humanidad de Gutiérrez Barboza: “Le quitaron su cabeza y todas sus extremidades”, acotó una fuente del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc).
El cadáver fue encontrado minutos después de haberse cometido el asesinato. Horrorizados, avisaron a los cuerpos policiales inmediatamente: “Iba pasando por el sitio cuando me pareció ver un cuerpo humano tirado en el piso. Cuando lo confirmé, llamé a la policía”, expresó un testigo.
“Creemos que Rubén tenía una deuda pendiente con alguien… Ese acreedor cobró de la peor forma”, indicó un allegado.
Detectives del Cicpc acudieron al lugar del hecho, minutos más tarde, para proceder al levantamiento del cuerpo y realizar las experticias.
Investigan las posibles causas que originaron el asesinato: “Por ahora lo que sabemos es que fue desmembrado, en la mañana, en el mismo sitio donde fue hallado. Estamos realizando labores de inteligencia para dar con el paradero de los homicidas. Por los momentos manejamos el móvil de un ajuste de cuentas, sin embargo, no descartamos ningún otro”, manifestaron.
El cuerpo de Gutiérrez fue llevado a la morgue de Cabimas para practicarle la necropsia de ley.
Justo hace un año, en mayo de 2017, ocurrió un caso similar. Oscar Eduardo Flores Cordero (23) fue descuartizado y sus restos dejados en una bolsa negra en el sector Punta Iguana, también en la autopista Lara-Zulia.
“Nos dimos cuenta porque varios perros callejeros estaban rompiendo la bolsa. Al abrirla, vimos su cuerpo desmenbrado”, contaron vecinos.
Fuente: El Carabobeño
