Entre los fallecidos hay 17 sirios, además de combatientes extranjeros, según la ONG, que no descartó que el número de víctimas pueda aumentar porque varios de los heridos se encuentran en estado grave, aunque no especificó su número.
La explosión se produjo en la zona de la presa de Euaried, a decenas de kilómetros al este de la ciudad de Palmira, en una zona desértica de la provincia de Homs (centro), y le siguió un ataque armado por parte de los yihadistas.
Según el Observatorio, al menos cinco combatientes del EI perecieron en ese asalto contra las fuerzas gubernamentales.
La violencia tiene lugar después de que cientos de integrantes del EI llegaran a la zona desértica de Al Badia, en el este de Siria, tras ser evacuados del sur de Damasco, en el marco de un acuerdo no reconocido por el Gobierno sirio.
Fuente: EFE