LeBron James lo ha hecho otra vez, estará en un nueva final de conferencia, la octava de forma consecutiva. El día de ayer consumó, junto a la gran actuación de sus compañeros JR Smith (15), Kyle Korver (16) y Kevin Love (23), la barrida a los Raptors de Toronto.
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Despachó no a cualquier rival, el equipo canadiense fue el primer sembrado del Este con 59 victorias –récord de la franquicia- y segundo mejor registro ganador de toda la NBA.
‘El Rey’ tiene de hijo a los Raptors, los ha eliminado tres años seguidos, acumulando 10 partidos seguidos ganados en playoffs. Quizás este año ha sido más valiosa la barrida, tomando en cuenta la movida de mata antes del cierre del mercado de fichajes, y que tambaleó el proyecto creado a inicios de la temporada a partir de la inclusión de Isaiah Thomas.
A pesar de las dudas, el equipo en conjunto respondió muy bien -no solo LeBrom- durante toda la serie, ante lo que se pensó podía ser el fin de la racha de ‘King’ James de presencias en finales de la NBA. Nada de eso paso, ni Kyle Lowry o DeMar DeRozan pudieron contener a esta bestia competitiva que se desata en la postemporada.
Desde el regreso de James a su ciudad natal, los Cavs suman su cuarta final de conferencia consecutiva. Esperan asistir a la cuarta serie final por el campeonato seguida, antes de eso deberán enfrentar a Celtics o Sixers que disputan la otra semifinal del Este. El equipo de Boston tiene ventaja de 3-1.
El dato a continuación es demoledor, demuestra la superioridad de LeBron en comparación con la actuación de Lowry y DeRozan en la serie.
Fuente: Meridiano
