Los residentes del municipio Mario Briceño Iragorry están pasando por momentos difíciles en lo que respecta al transporte público, lo que los obliga a caminar largas distancias para llegar a sus respectivos destinos.
Sobre el tema, Felicidad Ramos dijo: “Gasto diariamente 15 mil bolívares diarios, tengo que esperar tres horas para subirme a una camioneta de pasajeros. Allí uno tiene que soportar las insolencias de los colectores y de los choferes, ellos no respetan ni siquiera a los niños, mujeres embarazadas ni a los adultos mayores, ni a personas con discapacidad”.
Agregó que “muchas veces, cuando uno paga con un billete de cinco mil, se quedan con el vuelto o te dan el vuelto incompleto, esto es un caos, ya no soportamos viajar en camiones porque eso es un riesgo para nuestras vidas”, agregó Ramos.
Por su parte, María Miranda consideró que “es un abuso de los choferes y del alcalde que nosotros estemos sufriendo por el servicio de transporte público. Conozco mucha gente que ha perdido su trabajo, los estudiantes abandonaron sus clases, no hay alumbrado público, mucha inseguridad. Yo tengo que gastar 17 mil bolívares diarios y solamente gano el sueldo mínimo, estamos sobreviviendo en esta situación”.
También opinó María Laya, quien afirmó que “este municipio no ha tenido suerte con sus autoridades municipales, lamentablemente en MBI tenemos muchos problemas, pero los más graves son la falta de comida, medicina y transporte”.
Finalmente, Luis Aparicio dijo que “toda esta situación afecta la calidad de vida” y lamentó que las autoridades municipales no hayan metido su mano para resolver el problema; “los choferes han manifestado en reiteradas oportunidades que el mismo alcalde se comprometió a entregarles un kit de insumos para las camionetas de pasajeros, sin embargo, han pasado casi dos meses y no han entregado ni siquiera un litro de aceite; la máxima autoridad municipal tiene que asumir su responsabilidad y buscar el diálogo”.
LUIS CHUNGA | elsiglo
fotos | RAFAEL SALGUERO
