En horas de la noche del martes, dentro de los calabozos del Centro Penitenciario del estado Aragua en Zamora, ultimaron de múltiples balazos a un recluso que estaba pagando condena por hurto.
Julián Blanco, en medio de su impotencia y llanto al conocer la triste noticia del fallecimiento de su hijo, manifestó lo siguiente en las afueras de la Morgue de Caña de Azúcar. “No lo he visto, pero me llamaron a mi casa, ubicada en Boca de Uchire en Anzoátegui, que lo habían matado en Tocorón en una presunta riña”.
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– Acabo de llegar de esa región del país e inmediatamente me vine a la Morgue. Willmar Julián Blanco Serrano, de 28 años de edad, estuvo preso en la Penitenciaría General de Venezuela y luego que Iris Varela, ministra de Asuntos Penitenciarios, clausuró ese recinto carcelario, “mi muchacho fue trasladado a Tocorón, donde lastimosamente encontró la muerte en circunstancias que desconozco”.
– Llevaba seis años en la cárcel, y hoy lo tengo muerto. Es un dolor muy grande que sentimos la familia y mi mayor deseo es que los funcionarios de la Morgue, me entreguen rápidamente su cadáver para darle cristiana sepultura, expresó.
Por otro lado, se informó, de manera extraoficial, que el joven sostuvo un altercado con sus compañeros de celdas y éstos en señal de venganza, procedieron a ejecutarlo a tiros.
Se comentó que los desconocidos les desfiguraron el rostro a tiros. El cuerpo fue trasladado a Maracay para la autopsia. El caso está bajo averiguación de las autoridades del Ministerio de Prisiones y la Guardia Nacional Bolivariana.
LUIS ANTONIO QUINTERO | elsiglo
fotos | FAUSTINO PÉREZ
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