Los comedores comunitarios se convirtieron en una opción para los abuelitos y aquellas personas de bajos recursos, quienes acudían a estos servicios benéficos en busca de alimentos, sin embargo, desde hace algún tiempo los dos centros de caridad que se encontraban laborando en Maracay, específicamente en la calle Soublette y en Barrio Alayón, se encuentran cerrados.
Es por esta razón, y debido a las dificultades económicas y alimentarias que se presentan en el país, que los maracayeros realizaron un llamado a los entes gubernamentales para que se aboquen a solucionar esta problemática y tratar de que los mismos vuelvan a funcionar.
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En este sentido, Hilario Osorio afirmó que aunque en una sola ocasión asistió a uno de estos dos comedores le gustaría que en la actualidad estuvieran funcionando, “sería bueno que estuvieran trabajando, muchas personas acudían a ellos y prestaban un buen servicio, es una lástima que se hallan cerrados”.
Por su parte, Víctor Castillo afirmó que no asistió a uno, pero conocía a muchas personas que asistían a ellos, “sería perfecto que estuvieran funcionando en la actualidad, de esta forma muchas personas podrían ayudarse y más con todos los problemas que estamos pasando en estos momentos”.
Finalmente, se pudo conocer extraoficialmente que dichos comedores tienen aproximadamente 5 años cerrados, presuntamente por arreglos y remodelaciones, y sus trabajadores solo asisten a los mismos para cumplir horarios pero no prestan ningún servicio alimentario.
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fotos | RAFAEL SALGUERO
