Los obispos exhortan a que se respete la voluntad popular y se creen condiciones de transparencia e igualdad en los próximos procesos comiciales. De allí su llamado a que haya un nuevo Consejo Nacional Electoral y un marco que permita a todos los ciudadanos ejercer su derecho al voto sin limitaciones ni amenazas en las elecciones presidenciales de 2018.
“Una de las exigencias mínimas es que haya un CNE independiente que actúe con transparencia. Pero no es fácil lograrlo cuando se mantiene una dualidad con la existencia de una Asamblea Nacional y de una constituyente, así como de un Poder Judicial que obra en función de los intereses de una parte y no del todo el país”, señaló el cardenal Baltazar Porras, arzobispo de Mérida.
El prelado indicó que la estructura de un nuevo organismo comicial para el próximo año es uno de los elementos clave. Subrayó que no solo se requiere un cambio de dirigencia; también debe recuperarse el funcionamiento del registro electoral, que no ha permitido la incorporación de los nuevos votantes, y que además, las normas se cumplan. “No puede ser que con tantas migraciones, 24 horas antes los electores no sepan dónde les corresponde votar, tal como ocurrió en los procesos de 2017”.
Porras cuestionó que en las elecciones municipales del 10 de diciembre se reeditaran las irregularidades de las regionales del 15 de octubre y se recurriera a la coacción del electorado y el ventajismo oficialista. Señaló que ese contexto configuró un panorama poco confiable para el ejercicio del sufragio en el país.
“Hemos recibido las denuncias de abusos flagrantes y compras de votos del oficialismo aprovechándose de la necesidad de la gente. En Mérida hubo varias denuncias de que el transporte público no trasladaba a los ciudadanos el 10 de diciembre si antes no presentaban el carnet de la patria. Además, en muchos casos se ha pretendido desconocer la voluntad popular mediante subterfugios”, expresó
El cardenal consideró que en las municipales hubo confusión en la población porque, por un lado, la mayoría opositora llamó a la abstención y, por el otro, un sector participó en la contienda. El prelado manifestó que si se recurrió a la abstención debió argumentarse con una estrategia, exponiendo rutas alternativas para los ciudadanos. Le pareció un error que se haya asumido esa vía sin sustentación. “La abstención es una arma pacífica, pero por sí sola no se aguanta. La oposición debió presentar una contraparte”, dijo el obispo.
Señaló que el aspecto político es importante en medio de la crisis del país, por lo cual abogó porque la búsqueda de salidas abarque la crisis social.
Más coraje. El presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana, monseñor Diego Padrón, dijo que la Asamblea Nacional está en deuda con el país por no haber designado un nuevo Poder Electoral.
“Los cambios en el CNE debieron hacerse hace mucho tiempo y ese fue uno de los propósitos de la AN. Le ha faltado decisión y coraje para asumir esta decisión, no sé dónde está la falla pero efectivamente la hubo. Mientras siga habiendo ese mismo CNE seguirá la desconfianza. Se requiere un organismo que garantice la transparencia”, indicó.
Desestimó el resultado comicial en el que el oficialismo obtuvo 308 alcaldías y el sector de la oposición que fue a elecciones ganó 27. “Esos resultados con el triunfo del gobierno son una victoria cuestionada, la impresión que da es que hubo fraude. La gente piensa que no votaron los 9 millones de personas que se anunciaron porque quienes fuimos a votar no vimos personas en las mesas. Además, estas elecciones fueron convocadas por la ANC, que es un organismo que se atribuye funciones más allá de la Constitución”, esgrimió.
El prelado, quien habló a título personal, coincidió con el cardenal Porras en que la MUD equivocó la estrategia al insistir en la abstención el 10 de diciembre. Señaló que también ha habido errores en la forma en que la oposición ha conducido la negociación con el gobierno, por cuanto la información sobre el proceso en República Dominicana no ha sido clara o, en todo caso, está sesgada.
Monseñor Padrón dijo que es el momento de la sociedad civil, que está desalentada luego de los recientes comicios y por la situación del país, y la llamó a permanecer en la resistencia: “Los diversos sectores de la sociedad también deben trabajar por el país y no esperar instrucciones de la MUD”.
El cardenal Porras exhortó a mantenerse en la lucha pese a los obstáculos y las tribulaciones del país. “La crisis que vivimos es producto de nuestra misma sociedad. No podemos permanecer de brazos cruzados. El adviento y la Navidad son un llamado a la esperanza”.
El proyecto originó la crisis
Monseñor Ovidio Pérez Morales, obispo emérito, recordó que el episcopado venezolano hace años identificó al “gobierno revolucionario” y su plan del siglo XXI como un proyecto totalitario socialista comunista, que ha originado la grave crisis nacional. “En el ámbito político abundaron la confusión, la dispersión y el inmediatismo. Urge el realismo, la verdad y la unión”, indicó en su cuenta de Twitter.
El prelado, que ha sido muy crítico de las acciones políticas, indicó que luego de las elecciones del 10 de diciembre “si no se identifica bien al régimen, se estará como se ha estado, de sorpresa en sorpresa. Distraídos en consecuencias, cuando el problema está en las premisas. Absortos en las tácticas, descuidando las estrategias. Distraídos con juguetes como el diálogo y golosinas como los espacios de los que se habla”.
El obispo indicó que parte de las fallas al enfrentar al gobierno radican en que no se identifica bien la situación, con lo cual no se responde con coherencia al que se tiene enfrente, “se va del tumbo al tambo”, mientras el oficialismo “procede con lógica implacable”.
Fuente: El Nacional