Adriana Sánchez, madre de William Armando Guevara Méndez, de 24 años de edad, señaló ante los reporteros que su hijo “regresó de la República de Colombia, donde trabajaba en la industria de la construcción, para que me lo mataran en un procedimiento policial en la calle El Canal del urbanismo Guasimal”, al este de la ciudad de Maracay. “Nosotros le insistimos que no se viniera de ese país, ya que la situación económica en Venezuela está sumamente crítica y no nos hizo caso”.
“Nos respondió que quería ver a sus hijos, pasar las navidades con nosotros y en enero se regresaría. Estaba disfrutando de las vacaciones. Tenía 15 días en Maracay”, apuntó la denunciante.
Vivía en la calle Carta Blanca del barrio El Carmen, en la Ciudad Jardín, y el miércoles a eso de las 7:00 de la noche se encontraba en Paraparal, visitando a unos amigos.
Según testigos, allí hubo una redada y “mi muchacho fue detenido por una comisión de funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana, esos señores que pertenecen a las FAES”.
Tres horas más tarde lo mataron a tiros en la calle El Canal del sector Guasimal en Maracay, en un supuesto enfrentamiento, es una versión fuera del contexto legal. Incluso le sembraron un arma de fuego y aparentaron ante los medios de comunicación de ser un peligroso delincuente, cuando eso es totalmente falso. “Mi hijo no tuvo entradas a los cuerpos policiales ni mucho menos reseñas por algún delito y se marchó del país, ante la escasa oferta de trabajo, buscando una mejor estabilidad financiera para ayudar en la manutención de sus dos hijos”.
Indicó que “con mi declaración no voy a revivirlo, pero sí quiero dejar claro públicamente que Guevara Méndez no era delincuente”.
La ciudadana acudió en la mañana de ayer a la Morgue de Caña de Azúcar, en Mario Briceño Iragorry, acompañada de su hermano Ángel Méndez y vecinos del barrio El Carmen.
LUIS ANTONIO QUINTERO | elsiglo
fotos | DENYS SÁNCHEZ
