El presidente de la Federación de Trabajadores de la Industria Eléctrica (Fetraelec), Ángel Navas, aseguró que los problemas con la electricidad del país no son producto de “sabotajes”, como indica el presidente de Corpoelec, Luis Motta Domínguez, sino que se trata de las consecuencias de la falta de inversión en el sector.
“Lo que nosotros hemos visto es una situación de obsolescencia, falta de inversión y mantenimiento en el sector. No nos asignan recursos para realizar mantenimientos preventivos”, sostuvo el dirigente sindical.
La ausencia de mantenimientos preventivos regulares provoca una situación de desgaste en todas las maquinarias y equipos que progresivamente se deterioran, y Corpoelec se ve en la necesidad de realizar mantenimientos reactivos, apenas suficientes para sostener la operatividad de la industria, lo que genera una merma en la capacidad para mantener el servicio eléctrico a nivel nacional.
“Nosotros creemos que la situación es grave, casi de colapso. Lo óptimo sería hacer mantenimiento y comprar repuestos con tres años de anticipación”, advirtió.
Navas argumenta que la industria eléctrica importa la mayoría de sus componentes tecnológicos, sumamente costosos debido a la situación de las divisas. “Los almacenes de repuestos están en cero, no hay una inversión para mantener en buen estado las instalaciones y los equipos”, remarcó.
Pese a abordar las críticas hacia el estado que posee la industria eléctrica, Navas no desestima los factores externos que perjudican la consistencia y calidad del servicio. “En el último año ha habido una canivalización contra la industria debido a sectores delincuenciales que se han robado cables y equipos por el aumento del costo del cobre”, indicó.
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A raíz de estos hechos, sedes administrativas y operativas han sido perjudicadas, además de los trabajadores de las instalaciones ubicadas en zonas apartadas, quienes son víctimas constantes de robo y secuestro. Sin embargo, descarta que estas acciones delincuenciales sean producto de un ideal o que tengan algún propósito político.
“En su mayoría estamos viendo que es gente delincuente con intenciones de hurto y robo”, aclaró.
Fuente: El Mundo
